El Gato del Río (inaugurada el 3 de julio de 1996) es una obra del pintor y escultor Hernando Tejada instalada en la ribera del río tutelar de la ciudad, en el sector noroeste de la ciudad, conocido como Normandía. Esta majestuosa escultura de bronce, con el paso del tiempo se ha convertido en uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, junto con la estatua de Sebastián de Belalcázar y el Cerro de Cristo Rey. De día, el sol caleño hace que sus bigotes se calienten y busquen refugio en un gigantesco árbol que es su compañero; en la noche, rodeado de luces, permite que la brisa corra por su cola. La escritura fue fundida en Bogotá y transportada a Cali, donde se instaló en un lugar estratégico que hoy es un punto de encuentro y esparcimiento nocturno. ¿Cuánto mide esta estructura? El Gato Tejada, también conocido como el Gato del Río, mide 3.5 metros de altura y pesa tres toneladas. Su creación fue parte de un plan de embellecimiento y recuperación de la ribera del río Cali, y rápidamente se convirtió en un símbolo de la ciudad. Diez años después de inaugurado el monumento, en el mes de octubre de 2006 la Cámara de Comercio de Cali lideró una iniciativa de recuperación no solo del monumento, sino también de sus alrededores. La historia del Gato de Tejada es un poco difusa, ya que no hay evidencia definitiva de que haya existido un gato de verdad con ese nombre. Indudablemente, esta histórica estructura, representa la creatividad, la cultura y el espíritu de Cali, y han dejado una huella indeleble en la ciudad y sus habitantes. Este paseo es un testimonio del poder del arte para transformar espacios y conectar a las personas, y seguirá siendo un símbolo de orgullo y belleza para las generaciones futuras.
Nadie cuida lo que no quiere ni nadie quiere lo que no conoce